El escándalo que le explotó a Nicolás Petro, hijo del presidente, ha dejado al descubierto su faceta más politiquera. Las revelaciones de su exesposa, Day Vásquez, llegaron en varios casos soportadas con chats personales publicados en la revista Semana. Hay, al menos, 17 personas salpicadas, entre funcionarios, políticos y financistas oscuros.
El presidente Gustavo Petro ha buscado aislarse del escándalo. Su nombre no aparece directamente relacionado, pero sí el de algunos de los funcionarios de su gobierno. Internamente, pidió a sus funcionarios que no recibieran a su hijo y le informaran si les pedía puestos. Y en un comunicado le pidió a la Fiscalía que lo investigara, pero solo horas antes de que Vásquez revelara el escándalo en Semana.
Sin embargo, la bomba que estalló golpeó su imagen y ha puesto a muchas personas cercanas al petrismo a responder.