El titular del juzgado de instrucción 5 de la Audiencia Nacional de España, Santiago Pedraz, acordó la apertura de juicio oral contra elex presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol Soley, sus siete hijos y otras 11 personas, entre ellas la ex mujer de Jordi Pujol, Ferrusola Mercé Gironés.
Lo anterior tras hechos tipificados como delito de asociación ilícita, blanqueo de capitales, delito continuado de falsificación de documento mercantil, siete delitos contra la Hacienda Pública y delito de frustración de la ejecución.
En su auto de apertura de juicio oral, el juez requiere a Jordi Pujol Ferrusola para que en el plazo de 10 días deposite 7 millones y medio de euros y a Mercé Gironés 400 mil euros para cubrir las posibles responsabilidades civiles que puedan derivarse en este procedimiento por los delitos contra la Hacienda Pública que se les imputan.
El juez ratifica la situación de libertad de los acusados y explica que no existe la necesidad de asegurar su presencia en las sesiones de juicio oral con una situación distinta a la que han mantenido durante el proceso, incluida la de dejar constancia del domicilio en España y la obligación de comparecer a cuantos llamamientos judiciales sean precisos.
El auto concede un plazo de un mes para que se presenten escritos de defensa y de acusación de la Fiscalía Anticorrupción, la Abogacía del Estado y la acusación representada por Grand Tibidabo SA, en los que se indican los delitos y las penas de prisión solicitadas para los acusados.
El 16 de junio de 2020 el anterior instructor de esta causa propuso juzgar a los miembros de la familia Pujol Ferrusola por formar una organización criminal que, aprovechando su posición privilegiada de ascendencia en la vida política, social y económica catalana durante décadas, acumuló un patrimonio desmedido directamente relacionado con percepciones económicas derivadas de actividades corruptas.
En este procedimiento también se ha investigado a empresarios que presuntamente realizaron pagos millonarios a la familia, según explicaba De la Mata, disimulados bajo estructuras societarias más o menos sofisticadas y utilizando diferentes paraísos fiscales y fórmulas contractuales.
Todos esos contratos simulados encontraban su contraprestación en el ejercicio de concretas influencias por parte de la familia Pujol Ferrusola en adjudicaciones, cambios de calificación urbanística, adjudicación de concesiones, etcétera.